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Economía

Los encerrados en Sniace mantienen el “animo” y la convicción de que hay que dar esta “última batalla”

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Preocupados pero con ánimo, y sobre todo con la convicción de que "hay que dar esta última batalla". Los trabajadores de Sniace encerrados en la fábrica afrontan la segunda jornada con energía y agradeciendo las muestras de apoyo que están recibiendo, mientras esperan que los administradores concursales entiendan que el aplazamiento del juicio en la Audiencia Nacional es necesario.

La cara amable y solidaria del encierro la ponen los apoyos, las entregas de agua, leche, galletas, hasta caramelos, entregados por diferentes establecimientos, colectivos y ciudadanos, como las rosquillas que ha llevado una trabajadora de Konecta, la plantilla con la que Sniace compartió tantos meses de lucha y que no ha querido olvidarse de sus compañeros de movilizaciones.

Sin embargo, la parte dura la ponen situaciones como la de un trabajador que este jueves por la noche tenía que abandonar el encierro tras ser avisado de que su padre había sufrido un infarto. Y es que las familias que esperan fuera son las que más sufren la situación, hasta el punto de que muchos de los encerrados intentan ocultar el encierro a sus padres, suegros, abuelos... para evitar preocupaciones.

Dentro de la fábrica, los encerrados hacen lo posible para adaptarse y en las primeras horas han limpiado los espacios donde vivirán el encierro, y han hecho reparaciones para tener luz y agua caliente. Sin lujos, pero al menos con unas condiciones mínimas para afrontar el encierro.

Este jueves, en el que el sol no ha acompañado hasta entrada la tarde, los trabajadores han colocado en los depósitos de la sección de madera una gran pancarta con el lema "SOS", visible desde la autovía por los miles de vehículos que en estas fechas de Semana Santa pasan por las carreteras cántabras. También han izado una bandera republicana en los mástiles situados frente a la entrada principal de la factoría.

La entrada este miércoles de unas 200 personas en la fábrica de Sniace dispuestos a luchar para que los administradores acepten aplazar la vista en la Audiencia y negociar una salida que no aboque a la fábrica a la liquidación ha sido, según el secretario del comité, una respuesta "muy positiva" y "mayor de lo esperada", dado el cansancio que arrastra la plantilla después de 16 meses de lucha.

Pérez Portilla cree que la última reunión con el presidente de Sniace, en la que el propio Blas Mezquita confirmó que el juicio en la Audiencia Nacional acercaba a la empresa a la liquidación, ha impulsado a muchos trabajadores a encerrarse como medida "límite".

En este sentido, ha recordado que hasta el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha reconocido que es necesario un aplazamiento para negociar, en unas declaraciones que ha agradecido. Al igual que ha agradecido "parte" de las declaraciones del consejero de Industria, Eduardo Arasti, las relativas al aplazamiento, porque ha insistido que el Plan de Viabilidad, "no es ahora la prioridad, es secundario".

El comité ha reiterado que lo urgente es "salvar la situación laboral y que Sniace no se liquide", si eso se consigue llegará el momento de hablar de otras cosas, como un Plan de Viabilidad o un Plan de Pagos. "Pero si el día 22 la Audiencia Nacional falla la nulidad de los despidos la empresa irá a liquidación y ya no habrá más que hablar", ha subrayado el portavoz sindical, añadiendo una vez más que la prioridad es "arreglar la situación judicial".

Los encerrados continúan recibiendo visitas de formaciones políticas, y si durante la mañana y tarde del viernes eran los representantes de PRC y PSOE los que se acercaban a la fábrica a dar su apoyo, a medianoche medio centenar de personas respondían a la convocatoria de ACPT y se desplazaban desde la Plaza Mayor de Torrelavega hasta la entrada de Sniace, para transmitir su solidaridad a los trabajadores.

Al mismo tiempo, sindicatos y colectivos sociales preparan la manifestación convocada para el próximo lunes, a las 19.30 horas, que desde la Plaza Mayor realizará el recorrido inverso al que durante el último año han venido realizando casi cada viernes los trabajadores de Sniace para denunciar su situación, y acabará en la fábrica, para mostrar el apoyo de la ciudad a la plantilla.

El PSC-PSOE exige en el Parlamento que Diego rectifique las decisiones que han llevado a Sniace “al borde de la desaparición”

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PSOETezanosLidia

El PSC-PSOE presentará una iniciativa parlamentaria para instar al Gobierno de Cantabria a que "cumpla los compromisos adquiridos para ayudar a la viabilidad de Sniace y garantizar el futuro de la empresa" y pedir al presidente regional, Ignacio Diego, que rectifique las decisiones que han puesto a Sniace "al borde de la desaparición".

La secretaria general del PSOE cántabro, Eva Díaz Tezanos, ha afirmado que esta es "una más" de las múltiples iniciativas presentadas por su partido para garantizar, "incluso antes de que la situación de Sniace fuera crítica", la viabilidad de una empresa que "intentaba desarrollar nuevas líneas de producción, abrir nuevos mercados y transitar desde una empresa básicamente química a una empresa energética vinculada a las energías renovables".

Díaz Tezanos ha recordado que en noviembre de 2011, un año antes de que Sniace presentara su primer ERE, los socialistas llevaron al Parlamento de Cantabria una proposición no de ley instando al Gobierno a formalizar el aval de 60 millones de euros del crédito negociado con el Banco Europeo de Inversiones para instalar la planta de bioetanol de Sniace.

"El PP, como en todas las iniciativas que buscaban darle un futuro a Sniace, votó en contra", ha subrayado hoy en un comunicado.

También, "en el debate de investidura, Diego se negó a apoyar el proyecto para la diversificación de la producción de Sniace", ha manifestado Díaz Tezanos. "La decisión del PP de paralizar el desarrollo eólico fue otro golpe de gracia a los planes de la empresa para explorar nuevas vías de negocio", ha añadido, asegurando que ambas decisiones "pusieron en serio peligro a esta empresa, así como los 500 empleos directos de la factoría y cientos de empleos indirectos en la comarca de Torrelavega".

Por ello, Díaz Tezanos ha asegurado que la situación de Sniace no es solo consecuencia de la crisis ni de las actuaciones de la empresa, sino, sobre todo, de "decisiones políticas erróneas tomadas por el PP, por el presidente Diego en Cantabria y por Rajoy en España".

"La anulación del concurso eólico, la paralización de la planta de bioetanol, el incremento del canon de saneamiento, la aprobación por parte de Rajoy de nuevos impuestos ambientales y los recortes e inejecución presupuestaria que el presidente de Cantabria ha llevado a cabo en todo lo que tiene que ver directamente con las políticas y las inversiones industriales", ha dicho.

A su juicio, "ahora no sirve de nada decir, como ha dicho el presidente, que no aceptará decisiones que perjudiquen a la plantilla, porque todas estas decisiones ha perjudicado gravemente a la empresa y a sus trabajadores". Díaz Tezanos ha manifestado que "el presidente lo que tiene que hacer es cumplir sus compromisos y rectificar todas estas decisiones que han puesto a la empresa en la situación en que se encuentra, al borde de la desaparición".

En enero de 2013, "con el primer ERE sobre la mesa" y a petición de los trabajadores, "el presidente se compromete a ir a Madrid y reclamar un cambio" en la normativa sobre el canon de saneamiento y los impuestos medioambientales, pero "días después anuncia que lo ha conseguido, pero mintió, como tantas veces. Ninguna de las reformas legales para que Sniace tuviera una oportunidad de futuro está en vigor. Ninguna", ha insistido Díaz Tezanos.

"Y mientras tanto, el Gobierno de Rajoy ha aprobado una reforma energética que da la puntilla a Sniace", tal como han dejado claro los administradores concursales acerca de cuál es el problema de fondo para la viabilidad de la empresa, ha dicho.

La socialista ha afirmado que esta "no es la única empresa que se ve obligada a entrar en concurso de acreedores" pero "probablemente sí es la única con líneas de producción que pueden ser rentables, con posibles nuevos nichos de negocio, y el Gobierno tiene que hacer todo lo posible para darle futuro".

"Por eso, le pedimos al presidente de Cantabria, a su Gobierno, al presidente de España que actúen, que corrijan sus decisiones y que cumplan sus compromisos, porque es fundamental lograr que Sniace mantenga el máximo de empleos posibles", ha añadido.

Díaz Tezanos considera que eso es "fundamental" para los trabajadores y para miles de familias de la comarca del Besaya. "Y esto es lo que pretendemos con nuestra iniciativa parlamentaria", ha asegurado.

Para finalizar, Díaz Tezanos ha trasladado "el total apoyo" de los socialistas cántabros y el suyo propio a los trabajadores de Sniace que permanecen encerrados en la empresa "en defensa de sus puestos de trabajo".

Díaz Tezanos ha visitado hoy a los trabajadores de Sniace en su encierro. También se han acercado hasta la factoría la alcaldesa de Torrelavega, Lidia Ruiz Salmón, y el primer teniente de alcalde, el regionalista Pedro García Carmona, así como otros miembros de la Corporación.

Desconvocada la huelga de basuras de la comarca Saja-Nansa tras aceptar Oxital subrogar a los 24 trabajadores

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BasurasUTECorona

La huelga de la recogida de basuras en 17 municipios de la comarca Saja-Nansa ha sido desconvocada, tras aceptar la empresa adjudicataria, Oxital, la subrogación de los 24 trabajadores que estaban prestando el servicio en la zona occidental de Cantabria.

El secretario de Organización de la Federación de Construcción, Madera y Afines (Fecoma) de CCOO de Cantabria, Jesús de Cos, ha anunciado que ya están firmados los nuevos contratos y que en la tarde de hoy todos los empleados del servicio de recogida de basuras han sido dados de alta en la Seguridad Social con la empresa Oxital.

Empresa y trabajadores habían aplazado 24 horas el comienzo de la huelga, inicialmente prevista a partir de las 00.00 horas de hoy día 11, para continuar la negociación. En las últimas horas el acuerdo estaba bloqueado por la negativa de Oxital de subrogar a uno de los encargados, que tiene contrato de relevo, y su intención de sustituirle por un nuevo trabajador.

De Cos había asegurado que no lo iban a permitir porque "no es lo que se recoge en el convenio" y así lo habían ratificado los trabajadores en la asamblea celebrada a mediodía de este viernes. Finalmente, el cambio de postura de la empresa adjudicataria ha permitido el acuerdo y la desconvocatoria de la huelga.

El paro indefinido afectaba a los municipios de Comillas, Cabezón de la Sal, Ruiloba, Alfoz de Lloredo, Udías, Mazcuerras, Cabuérniga, Rionansa, Ruente, Los Tojos, Tudanca, Polaciones, Lamasón y Herrerías, así como la mancomunidad Valles de San Vicente, formada por los ayuntamientos de San Vicente de la Barquera, Val de San Vicente y Valdáliga.

Precisamente, eran los municipios que forman esta mancomunidad los que estaban en el centro del conflicto al querer realizar una adjudicación propia, argumentando que podían rebajar el coste del pliego de condiciones redactado por la empresa pública.

Los 14 ayuntamientos donde prestaba servicio la UTE Corona, del grupo Emilio Bolado y en concurso de acreedores, aceptaron el pliego de condiciones de MARE y la subrogación de los 24 trabajadores a la nueva adjudicataria, Oxital. Sin embargo, San Vicente de la Barquera, Val de San Vicente y Valdáliga, querían adjudicar la recogida de basuras pero sin los operarios, procediendo a nuevas contrataciones para cubrir la plantilla.

El día 11 comienza una huelga indefinida en la recogida de basuras de 17 municipios de la zona occidental

Los trabajadores de Sniace ponen en el encierro sus últimas esperanzas para salvar la fábrica

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Mochilas, sacos de dormir, provisiones y las pocas fuerzas que quedan después de 16 meses de una lucha cada vez más incierta y descorazonadora. Los trabajadores de Sniace han acarreado todo lo que necesitan para afrontar un encierro indefinido en la factoría torrelaveguense con el que intentar, a la desesperada, que los administradores concursales aplacen el juicio en la Audiencia Nacional que pone a la empresa al borde de la liquidación.

Unas 200 personas han entrado esta mañana por las puertas de la que todavía es "su fábrica", dispuestas a quemar su último cartucho. Son ese grupo de trabajadores que tienen la convicción de que, pase lo que pase y sea cual sea el futuro de Sniace, ellos habrán hecho todo lo que han podido o han sabido para intentar salvar ese medio millar de empleos.

Esta vez el encierro, el tercero desde que comenzó el conflicto en enero de 2013, es distinto, por todo, y se notaba, en los que entraban y en los que quedaban fuera. En los familiares se deslizaban algunas lágrimas, aunque lo hacían detrás de las gafas de sol y en las esquinas, porque lo que tocaba era animar.

En los que entraban, las lágrimas aparecían al llegar al que durante muchos años, en algunos casos toda la vida, ha sido su puesto de trabajo. La suciedad acumulada, el abandono y aquellos objetos que hace año y medio quedaron en el cajón o la taquilla a la espera de ser recuperados en unos días o en unas semanas, ponen en evidencia lo largo del conflicto.

Para todos los trabajadores ha sido inevitable pensar al cruzar hoy las puertas de naves y laboratorios que puede ser la despedida, la última vez que volverán a pasar las horas en esas instalaciones de Sniace, que provocan en quienes las han vivido una relación de amor-odio.

Si los dos encierros anteriores, en junio y en septiembre, se hicieron en la zona de portería, casi dentro casi fuera de la fábrica, y con cierto aire si se quiere lúdico, el que hoy ha comenzado, dentro dentro, ha removido muchas cosas. Preocupación la hubo siempre, pero ahora se ha transformado en angustia al ver que el reloj corre en su contra.

Y luego está "El Encierro", con mayúsculas, el que se vivió hace 21 años y que para la plantilla de Sniace ha sido y es, al mismo tiempo, una losa que pesa sobre sus espaldas y un resorte que les impulsa a no dejar de pelear.

A siete días de la cita en la Audiencia Nacional, las cartas están repartidas y los trabajadores han apostado todo lo que les queda a este encierro, esperando que los administradores concursales crean que pueden perder la mano y que la liquidación no interesa a nadie y acepten aplazar el juicio y sentarse a negociar.

La plantilla se reunía a las 11.00 horas en una pequeña asamblea para las cuestiones de orden práctico y para tratar de que los días que quedan por delante se hagan lo más llevaderos posibles. Se han repartido tareas para limpiar y adecentar los espacios, se han establecido los horarios de las asambleas diarias, a las 19.30 horas, y se ha recordado que el encierro debe ser tal.

Parte de la plantilla, la que por diversas circunstancias personales o laborales no se pernoctará en la fábrica, apoyará el encierro durante el día, mientras que familias, amigos y diversos colectivos sociales, políticos y sindicales, acudirán a la entrada principal, la famosa verja, para dar a los de dentro comida y, sobre todo, ánimos.

El secretario del comité, Antonio Pérez Portilla, hacía antes de entrar un llamamiento a las instituciones para "que sigan presionando para lograr el objetivo, porque con las palabras solo no lo vamos a conseguir". También pedían el apoyo de la población, recordando que si Sniace cierra ellos perderán sus trabajos pero Torrelavega y la comarca del Besaya perderán medio millar de empleos directos y los que arrastran de indirectos, que serán un "mazazo" para la maltrecha economía de la zona.

El próximo lunes se ha convocado una manifestación de apoyo, que realizará el recorrido inverso al habitual, de la ciudad a la fábrica. La manifestación partirá a las 19.30 horas de la Plaza Mayor y acabará en la entrada principal de la fábrica.

 

Los administradores confirman que la reforma energética lleva a Sniace a la inviabilidad, por lo que el coste de las jubilaciones ya no es importante

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Los administradores concursales han confirmado hoy que los últimos cambios en los parámetros retributivos del sector energético y la cogeneración hacen que la situación de Sniace sea "muy delicada" y su viabilidad "muy complicada", por lo que el coste de las jubilaciones, "ha dejado de ser importante".

El comité se reunirá con los administradores el día 24, aunque estos han avanzado que, las repercusiones de los cambios en el sector energético y el último informe emitido por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), han hecho que ni siquiera hayan considerado el proyecto de prejubilaciones propuesto por el comité y presentado por la empresa este jueves.

"La solución del conflicto, no depende de vosotros, no es cuestión de que tengáis un proyecto que valga seis, ocho o dos millones, eso ha dejado de ser lo importante", ha transmitido telefónicamente uno de los administradores, José Luis Ramos Fortea, al secretario del comité. "Con el informe que tenemos encima de la mesa sobre el tema de la cogeneración la viabilidad de la empresa ya no la veo, sin entrar a considerar siquiera vuestro proyecto", ha manifestado el administrador.

El secretario del comité, Antonio Pérez Portilla, ha contactado hoy vía teléfono con uno de los administradores, tras las noticias sobre el rechazo a la propuesta de jubilaciones y la falta de respuesta a la solicitud de una reunión con la intervención concursal, gestionada por la secretaria regional de UGT, María Jesús Cedrún.

La intención era insistir en una reunión para detallar la propuesta del comité para retrotraer los despidos de la plantilla y las jubilaciones, y ofrecer la posibilidad de "adaptar" de algún modo el plan para hacerlo asumible. Igualmente, el comité quería transmitir a los administradores el problema que puede generarse al quedar abocados a la celebración del juicio en la Audiencia Nacional, que en opinión de los sindicatos "no es bueno ni para la empresa ni para los trabajadores".

La respuesta del administrador ha sido que no tienen "ningún problema" en recibir al comité, aunque no será posible la próxima semana y han aceptado que tenga lugar el día 24, fecha en que ya tenían previsto un encuentro con la empresa. La alternativa ha sido aceptada de buen grado, asegurando Ramos Fortea que estará "encantados de explicar personalmente la situación", previa consulta con el otro administrador concursal y con Sniace.

Sin embargo, y ante las reticencias porque la reunión se produzca tras el juicio en la Audiencia Nacional, su explicación ha sido que la fecha no cambiará nada, porque no tiene que ver con "el problema de fondo" de Sniace, que es la reforma energética. "No os quiero engañar, es necesario rehacer los números y personalmente lo veo muy mal", ha añadido el administrador.

Pérez Portilla ha señalado que, aunque la reunión sea posterior al juicio, si fuera posible un acuerdo, sería legalmente viable mientras la sentencia no haya sido publicada. "La esperanza es lo último que debemos perder", ha subrayado.

El portavoz sindical ha dicho que las manifestaciones del administrador concursal confirman que la cuestión no es si las jubilaciones son "caras o baratas", sino que "el verdadero escollo en su opinión es la situación en que la reforma energética ha puesto a la empresa", dejándola "más cerca de la liquidación" que de una posible salida, al margen de las propuestas o pretensiones de los trabajadores.

El rechazo de los administradores concursales a la propuesta de jubilaciones deja a Sniace más cerca de la liquidación

Sniace defenderá ante los administradores la propuesta de jubilaciones y sin excedente de plantilla presentada por el comité

 

Los trabajadores afrontan el encierro dispuestos a “quemar los últimos cartuchos” para salvar la complicada situación de Sniace

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Los trabajadores son conscientes de la complicadísima situación que atraviesa Sniace, pero si les cupiera alguna duda tanto el presidente, Blas Mezquita, como los administradores concursales, les han reconocido que la empresa, en este momento, está más cerca de la liquidación que de la reapertura.

Sin embargo, están dispuesto a "quemar los últimos cartuchos" con el encierro indefinido que comienza este miércoles, para forzar a los administradores al aplazamiento del juicio en la Audiencia Nacional, con el argumento de que si los tribunales fallan en contra de la empresa y declaran nulos los despidos, la liquidación sería inevitable.

Mezquita ha atendido –esta vez en 24 horas- la petición del comité y ha acudido a la fábrica de Torrelavega para mantener una reunión de urgencia, en la que ha transmitido su "preocupación" por el encierro que van a iniciar los trabajadores, aunque les ha ratificado lo dicho por los administradores, que la reforma energética aboca a Sniace a la liquidación.

Según las cifras que el presidente de Sniace ha dado hoy a los sindicatos, los nuevos parámetros retributivos y la supresión de las primas a la cogeneración, le costarán a la empresa 35 millones de euros. Unos cambios que hacen que "los números hechos hasta ahora, hay que tirarlos a la basura".

La previsión es que el informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) se convierta en orden ministerial en el próximo Consejo de Ministros, que se celebraría en un plazo máximo de quince días.

Tras la reunión, los delegados de UGT, SU y CCOO –solicitantes del encuentro- han explicado a los trabajadores en una improvisada asamblea que Blas Mezquita ha afirmado que "no hay divergencias" en lo que los administradores han manifestado al comité y a la empresa, que la situación es "muy difícil".

Mezquita coincide con los trabajadores en que el juicio en la Audiencia Nacional es "un riesgo", pero ha asegurado que "no está en sus manos" pedir el aplazamiento o la retirada de la demanda y que depende de los administradores, que parecen dispuestos a afrontar ese riesgo.

Los administradores concursales insisten en seguir con el proceso judicial, tal y como ha confirmado uno de ellos, José Luis Ramos Fortea, que telefónicamente ha contactado con el secretario del comité para hacer llegar su preocupación por la medida de presión que van a tomar los trabajadores.

El secretario del comité, Antonio Pérez Portilla, ha explicado que ayer mismo recibió una llamada telefónica de Ramos Fortea, en la que el administrador manifestó que el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, había contactado con él debido a la situación que se ha planteado en los últimos días en torno a Sniace.

Todo esto demuestra para el comité que el anuncio del encierro "hace daño" y eso refuerza su convicción de que, aunque es muy complicado, todavía "hay una posibilidad de cambiar el rumbo". Esa esperanza se centra en un acuerdo antes del próximo martes 22 o, in extremis en la reunión que el día 24 mantendrá el comité con los administradores.

"No hemos perdido aún la última oportunidad, hay que tirar para adelante", ha dicho Pérez Portilla animando a los trabajadores. El mensaje del delegado de UGT ha sido reiterado por los representantes de SU, Mario Villar, y CCOO, Luis Corrales, que han coincidido en que su último intento es ir a negociar con los administradores desde una posición de "fuerza".

Los trabajadores inician este miércoles, a las 11.00 horas, un encierro sin fecha de conclusión, para reclamar a los administradores un aplazamiento en la Audiencia Nacional y un acuerdo laboral que evite una posible sentencia de nulidad de los despidos y la liquidación ante la imposibilidad para la empresa de afrontar el coste de las indemnizaciones.

Los administradores confirman que la reforma energética lleva a Sniace a la inviabilidad, por lo que el coste de las jubilaciones ya no es importante

El rechazo de los administradores concursales a la propuesta de jubilaciones deja a Sniace más cerca de la liquidación

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Los administradores concursales han rechazado hoy la propuesta de jubilaciones y reincorporaciones presentado hoy por la dirección de Sniace, dejando el futuro de la empresa en manos de la Audiencia Nacional. El rechazo al plan, por la situación económica del grupo y por su alto coste, aboca a empresa y trabajadores al juicio del próximo día 22 y a jugarse a cara o cruz la liquidación.

El presidente de Sniace, Blas Mezquita, ha transmitido que los administradores no han tomado en cuenta la propuesta y en la reunión celebrada en Madrid han esgrimido el informe de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMV) que regula los nuevos parámetros retributivos de las energías renovables y las primas a la cogeneración, y que "empeora la situación" económica de la empresa.

Según ha explicado Mezquita al comité, a través del director de Recursos Humanos, los administradores han valorado que las circunstancias económicas no hacen posible afrontar ese tipo de propuestas, que incluía un plan de jubilaciones y de transformación del ERE de extinción de septiembre en un expediente de regulación temporal para la reincorporación de la plantilla.

Del mismo modo, han señalado el "alto coste" de la propuesta, que la propia empresa cifraba en unos 18 millones de euros, de los que unos 7,5 correspondían a las jubilaciones.

Ante la falta de acuerdo entre la dirección y los sindicatos, que rechazaron las alternativas que ofrecía la empresa porque implicaban excedentes de plantilla, Mezquita aceptó presentar a los administradores la propuesta que había planteado el comité y que mediante APJs, jubilaciones y contratos relevo, daban una salida no traumática a todos los trabajadores.

El secretario del comité, Antonio Pérez Portilla, ha criticado que la empresa haya "inflado" el coste de la propuesta y que Mezquita haya manifestado en todo momento sus "dudas" sobre la misma, además de no ocultar su poca "convicción" para defenderla ante los administradores.

Aunque en principio la empresa no ha mostrado intenciones de reunirse antes del juicio del 22 en la Audiencia Nacional, los sindicatos esperan ser informados con detalle del contenido de la reunión y de los motivos que han argumentado los administradores para rechazar la propuesta de jubilaciones sin ofrecer o pedir alternativas, ha señalado Pérez Portilla a HT.

Y todo ello a sabiendas de que el juicio de la Audiencia Nacional puede llevar a Sniace a la liquidación, si los magistrados fallan en contra de la empresa y declaran nulo el expediente de despidos, condenando a la empresa al pago de una indemnización de 45 días por año trabajado.

El propio Mezquita ha afirmado en varias ocasiones que la situación económica de Sniace hace imposible afrontar esas indemnizaciones y supondría la liquidación. Ese fue el motivo por el que la dirección ofreció a los trabajadores la posibilidad de llegar a un acuerdo y pedir la retirada de la demanda, presentada por la empresa, en la Audiencia Nacional.

El comité se reunirá el próximo lunes y a las 12.00 horas habrá una asamblea de trabajadores para valorar la situación y decidir qué pasos dar a partir de ahora.

La plantilla de Sniace inicia el miércoles un encierro “límite” para forzar a los administradores a retirar el juicio en la Audiencia Nacional

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Sniaceasamblea1404

Una "medida límite, ante una situación límite". Así plantean los trabajadores de Sniace el encierro que iniciarán este miércoles, a las 11.00 horas, para forzar "in extremis" a los administradores concursales a retirar la demanda de la Audiencia Nacional y alcanzar un acuerdo con la plantilla.

"Hemos luchado durante 16 meses, no vamos a arrojar la toalla en estos diez días que quedan para que la situación se resuelva, en un sentido u otro", ha asegurado el comité, que ha sometido la decisión al refrendo de la asamblea de trabajadores, pidiendo a los que "estén dispuestos a pelear por su empleo" que hagan un último esfuerzo.

Los sindicatos se reunirán con los administradores concursales el próximo día 24, a las 17.00 horas en Madrid. El encuentro ha sido confirmado hoy mismo, mientras que el comité también ha pedido una entrevista con el presidente de Sniace, Blas Mezquita, para reclamarle que presione a los administradores para retirar una demanda que "no beneficia a nadie, ni a la empresa ni a los trabajadores", han señalado estos.

Esta vez el encierro no se realizará en la zona de portería, sino en las instalaciones fabriles y se plantea sin fecha cerrada de finalización, ya que, aunque el juicio en la Audiencia Nacional es el 22 de abril, aún sería posible que las partes llegasen a un acuerdo antes de que se haga pública la sentencia, lo que deja un margen de unos días más.

Debido a las situaciones personales, de salud y familiares, de muchos trabajadores, la plantilla ha decidido en la asamblea que parte de ellos, esperan que en torno a un centenar de personas, se encierre en la fábrica y el resto acuda a apoyarles durante el día.

"Todavía tenemos una posibilidad, aunque sea entre un millón, y tenemos que intentarlo, no pensar después que pudimos intentarlo durante diez días y no lo hicimos", ha señalado el secretario del comité, Antonio Pérez Portilla, transmitiendo la postura que apoyan los tres sindicatos, UGT, SU y CCOO.

La medida de presión se plantea después de que los administradores desestimaran la propuesta de jubilaciones y reincorporaciones planteada por el comité y presentada por la empresa. Los interventores concursales confirmaban posteriormente que ni siquiera habían tomado en consideración la propuesta porque la reforma energética ha abocado a Sniace en una situación de inviabilidad y cerca de la liquidación.

Así, los administradores concursales han reconocido que el "problema" de Sniace no es el acuerdo laboral ni el coste de las prejubilaciones, sino la "complicada" situación en que queda la empresa tras el informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia con los nuevos parámetros retributivos y primas a la cogeneración.

El comité no ha querido engañar a los trabajadores y ha reconocido que "las posibilidades son pocas" pero insistiendo en que hay que intentarlo. En este sentido, Pérez Portilla ha afirmado que no caben excusas para no participar, porque en este encierro "puede colaborar todo el que quiera" y "hay papel para todos".

"Estamos en una situación límite, en la que solo caben acciones límite, no nos queda otra, no podemos tirar la toalla", ha dicho el representante del SU, Mario Villar. Del mismo modo, el delegado de CCOO, Luis Corrales, ha afirmado que "es un sacrificio duro, pero lo vamos a intentar".

Los sindicatos han recordado que, paradójicamente, si los trabajadores ganaran el juicio en la Audiencia Nacional y los magistrados fallaran que los despidos fueron nulos y corresponde una indemnización de 45 días por año trabajado, eso supondría que la propia plantilla daría "la puntilla a Sniace", porque la empresa se vería abocada a la liquidación.

Por eso los trabajadores defienden una retirada de la demanda presentada por la empresa y un acuerdo con la plantilla, para fijar las condiciones de jubilación y de reincorporación de los trabajadores.

Sniace defenderá ante los administradores la propuesta de jubilaciones y sin excedente de plantilla presentada por el comité

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La dirección de Sniace defenderá este jueves ante los administradores concursales la propuesta presentada por el comité, que plantea la jubilación de unas 180 personas a través de distintas fórmulas y cuya principal diferencia con las alternativas de la empresa es que la aplicación de contratos relevo absorbería un posible excedente de plantilla, dando soluciones no traumáticas a toda la plantilla actual.

Empresa y sindicatos no han llegado hoy a un acuerdo entre las propuestas que la dirección consideraba mejores y las condiciones que reclamaban los representantes de los trabajadores, por lo que finalmente el presidente de Sniace, Blas Mezquita, ha aceptado presentar a los administradores la alternativa del comité, a pesar de manifestar sus dudas de que sea aceptada por su coste.

Sniace cifra para esta propuesta un coste de 18 millones de euros, de los que 7,4 corresponderían a las jubilaciones y el resto a otros conceptos que la empresa introduce en la propuesta, como los pagos de Seguridad Social por el periodo de reversión del ERE o los salarios de los readmitidos.

El comité considera que la dirección "infla" los números para seguir apostando, con el argumento del coste, por otras posibilidades que en todos los casos supondrían despidos, porque la dirección insiste en perseguir una plantilla objetivo que dejaría excedentes, al menos de medio centenar de personas.

Con todo, Mezquita, tras la reunión de hora y media mantenida hoy con los representantes de los trabajadores, se ha comprometido a exponer a los administradores concursales las ventajas de llegar a un acuerdo con la plantilla que haga posible retirar la demanda en la Audiencia Nacional por la nulidad de los despidos. El argumento es que una sentencia contraria a la empresa y unas indemnizaciones de 45 días abocarían a Sniace a la liquidación.

La reunión entre la dirección y los administradores será mañana a las 12.00 horas, y serán los responsables concursales los que decidan si es viable o no la propuesta. A partir de ahí comenzaría un nuevo proceso tanto judicial, para conseguir la retirada de la demanda en la Audiencia Nacional, y económico, ya que Sniace tendría que "encontrar el dinero" para hacer frente a su aportación en las jubilaciones y al resto del coste de arrancada.

La alternativa de los sindicatos combina las APJs, para los trabajadores con edades entre los 58 y los 61 años a 31 de diciembre de 2013; jubilaciones normales los mayores de 63 años; y la novedad sobre las propuestas de la empresa, la aplicación de contratos relevo para el grupo de 61 y 62 años.

Los contratos relevo suponen que el trabajador se jubila en un 75% y trabaja el 25% de su jornada mensual, mientras que la empresa incorpora otra persona para hacer la jornada restante. A través de esta propuesta, el comité asegura que se podría reducir la externalización de algunos puestos de la plantilla y llegar a un excedente cero.

Los representantes del comité, Antonio Pérez Portilla (UGT), Mario Villar (SU), y Luis Corrales (CCOO), han explicado a los trabajadores que queda en manos de los administradores la decisión final, y aunque son conscientes de que la propuesta "no le gusta a la empresa" y su convicción a la hora de defenderla puede no ser la mejor, los sindicatos no han querido aceptar otras alternativas que serían más lesivas para los trabajadores.

Así, el comité ha insistido en que "es imposible" encontrar una solución que "guste a todos", por ello su empeño ha sido buscar "lo mejor para el colectivo" y, sobre todo, evitar que haya despidos, objetivo que ha movido desde el pasado mes de septiembre todas las movilizaciones que ha realizado una parte importante de la plantilla.