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Economía

Konecta no ha cumplido el auto del TSJC y la plantilla no ha podido entrar a su centro de trabajo

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Konecta no ha cumplido este lunes el auto del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria que ordenó la prórroga de la suspensión cautelar del traslado a Valladolid y la plantilla, que a las 9.00 horas se presentó en sus puesto de trabajo, se ha encontrado cerrada la puerta del call center de Torrelavega. Los trabajadores han denunciado la situación en comisaría y ante la Inspección de Trabajo, y han levantado acta notarial de que la empresa no les ha permitido cumplir su contrato y no ha respetado el auto del TSJC.

Después de más de cinco horas con los trabajadores en la calle, se ha personado el responsable de Recursos Humanos de Konecta, Jaime Castel, pero únicamente para anunciar que la empresa recurrirá las medidas cautelares y que, por el momento, no hará nada sobre la situación en que han quedado los trabajadores, pasando la responsabilidad al TSJC. El portavoz de Konecta no se ha reunido con el comité en el centro de trabajo, sino en un hotel situado junto a las instalaciones de la empresa.

Castel ha explicado a los representantes sindicales que hasta hoy lunes no se les ha comunicado oficialmente el auto de las cautelares y argumentan que Konecta "ya no tiene centro de trabajo", donde la plantilla pueda retomar su puesto. Sin embargo, en todo momento, ha evitado indicar a los trabajadores qué deben hacer o trasladar todo ello por escrito, a excepción de un documento de unas líneas indicando que Konecta ha recibido el auto judicial y recurrirá las medidas cautelares.

El pasado jueves día 5, apenas unas horas antes de que concluyera el plazo para que los trabajadores comunicaran si aceptaban marchar a Valladolid o pedían la extinción del contrato, el Tribunal Superior de Justicia aceptó prorrogar la suspensión cautelar del traslado hasta que se falle el recurso que los sindicatos han presentado contra la sentencia del Juzgado Número 2 de lo social que el pasado 28 de noviembre ratificó la decisión de Konecta.

La empresa en ningún momento se puso en contacto con los trabajadores ni con sus representantes sindicales para informarles de qué debían hacer, dado que Konecta cerró el call center de Torrelavega el pasado día 29, por lo que los trabajadores acudieron hoy a sus turnos correspondientes, encontrando el centro cerrado.

El comité habló telefónicamente a primera hora con el responsable de Recursos Humanos que, tan solo verbalmente, recomendó a los trabajadores volver a su casa y esperar un burofax en el que la empresa les explicaría los pasos a tomar.

La plantilla no quiso abandonar su puesto de trabajo sin un informe o acta oficial que les avalase y a partir de ese momento iniciaron un peregrinaje, telefónico y en persona, por la Inspección de Trabajo, Juzgados de Torrelavega, Policía Local y Comisaría de Policía Nacional. Cada una de estas instancias derivaba a otra la competencia de levantar informe de la imposibilidad de acceder a sus puestos de trabajo, por lo que pasaban las horas, mientras la plantilla, a pesar de la gélida mañana, continuaba en la calle frente al call center, situado en la calle Marqués de Santillana.

Finalmente, y siguiendo instrucciones de sus abogados, los trabajadores solicitaron y pagaron la presencia de un notario que levantó acta en los diferentes turnos del call center de que las instalaciones estaban cerradas. También remitieron en cada turno un fax a la Inspección de Trabajo denunciando la situación y presentaron denuncia en comisaría.

La plantilla ha explicado que mañana martes volverán a las 9.00 horas y si la situación se mantiene con todo ello acudirán al Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, para denunciar que Konecta no está acatando su auto, que ordena suspender el traslado y las medidas que conlleva hasta que se vea el recurso.

Los trabajadores no ocultaban hoy su "asombro" por la situación que estaban viviendo, su sensación de "abandono" por parte de todas las instancias a las que se estaban dirigiendo y de "indignación", viendo como a pesar de contar con el respaldo de un auto del TSJC Konecta "sigue haciendo lo que le da la gana".