Torrelavega

La Asociación del Barrio San Gil pide una “regeneración” al funcionamiento “caciquil y de postureo” de la Unión Vecinal

La Asociación del Barrio San Gil acusa a la Unión Vecinal de Torrelavega de funcionamiento "caciquil y de postureo" y reclama una "regeneración de arriba abajo" de este colectivo en el que no se sienten representados. A su juicio, la Unión Vecinal se ha convertido en un "ente ficticio, sin objetivos, politizado" y dirigido por un "reducido" número de personas, un modelo "amparado" por el equipo de Gobierno PSOE-PRC "que proyecta una falsa ilusión de representación" de los vecinos de Torrelavega.

Según critican, las reuniones de la Unión Vecinal no tienen "ni acta ni moderador", ni se puede hacer "aportaciones", resultando "faltas de contenido, teledirigidas, unidireccionales y meramente informativas", pero en ningún caso "participativas ni representativas" de las opiniones e ideas de las asociaciones.

"Las reuniones funcionan de la siguiente manera: el portavoz, Manuel Ortiz, hace un simulacro de orden del día, y relata las cosas que él y sus compañeros han estado haciendo, comenta las últimas noticias, y suele derivar en un debate totalmente sin rumbo y sin orden, acallando rápidamente y desoyendo cualquier crítica u opinión contraria. Y así sucesivamente", denuncia el portavoz de San Gil, Pedro S. Alonso, en un comunicado.

Considera esta asociación que, frente al pluralismo político y la diversidad que hay en la ciudad, en el caso de la Unión Vecinal "la mayor parte de las decisiones que afectan a todos los barrios de Torrelavega las toman unilateralmente personas afines al PRC, como se puede comprobar en cualquier foto de la UV". A este respecto, apuntan directamente al portavoz, Manuel Ortiz, y José María Gavito, que incluso iba de número 9 en la lista por el PRC en las últimas elecciones municipales", y que es representante de la AAVV San José.

El portavoz de San Gil se pregunta "a qué intereses responde realmente la Unión Vecinal", y califica de "significativo" que "con la cantidad de problemas vecinales que hay en la ciudad, algunos desde hace décadas" –mercancías peligrosas, transformador de Lasaga Larreta, soterramiento, desahucios, pobreza, pozos negros, La Viesca, La Turbera...- "solo saque comunicados pidiendo centros de emprendedores, rotondas y viales".

Unos comunicados, se añade, en los que se "intenta una sensación de unanimidad", con frases como "por mayoría absoluta" o "todas las asociación están a favor", pero eso "es faltar a la verdad, porque cada vez más asociaciones están abandonando la Unión Vecinal descontentas con su funcionamiento, y las opiniones o votaciones en contra no aparecen reflejadas en esas notas de prensa".

Por todo ello, la Asociación de Vecinos San Gil plantea una serie de sugerencias, "que no nos dejan hacer en las propias reuniones", para mejorar el funcionamiento de la Unión Vecinal. Cosas como un orden del día previo, con aportaciones de las asociaciones, actas y seguimiento de las mismas; y creación de un email y un perfil de facebook para recibir aportaciones y opiniones de los vecinos.

También la convocatoria de una Asamblea Extraordinaria, a la que se invite a las asociaciones que no están asistiendo, haya un debate interno sobre actuaciones acertadas y desacertadas y se marque una línea de trabajo, unos objetivos y "unos estatutos de funcionamiento, definiendo las funciones y mandato del portavoz", ya que el actual lleva seis años en el cargo. Algo, añade Alonso que podría hacerse en un "acto público" y abierto a la ciudadanía.

Finalmente, piden al equipo de Gobierno PSOE-PRC que fomente el reglamento de Participación Ciudadana y facilite en la página web del Ayuntamiento un espacio donde se haga un censo de las asociaciones de vecinos y la forma de contacto con ellas, para que los vecinos puedan dirigirse a ellas.

Por otro lado, el portavoz del Barrio San Gil ha aprovechado para señalar que comparten la "sensación de abandono" que hace unas semanas manifestó públicamente la AAVV de Campuzano, que también criticaba el funcionamiento de la Unión Vecinal.

"En 4 años, y con 2 equipos de Gobierno diferentes, tanto PP como PSOE-PRC, la única vez que los políticos se han pasado por aquí ha sido para inaugurar el parque infantil, una petición de hace varios años, cuya construcción se inició 3 días antes de las elecciones municipales de 2015", ha acusado. Para los próximos cuatro años, en el informe de obras en los barrios, "para el cual nadie nos ha preguntado nuestra opinión ni cuales eran nuestras prioridades", San Gil tiene destinada la "ridícula cantidad de 1.000 euros" para repintado de viales. Del mismo modo, afirman que el Ayuntamiento funciona como "una caja negra, y ni siquiera contesta a las instancias".

Asegura que no quieren "obras faraónicas", y cita algunas de las necesidades transmitidas por los vecinos de este barrio: el vallado del parque infantil, ya que tres de sus márgenes dan a la carretera; renovación y limpieza del alumbrado, una parada del Torrebus a la altura de la piscina municipal; eliminación de vertederos descontrolados en el rocódromo; y un centro cívico.