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Torrelavega

El niño apuñalado niega que su pandilla acosara al propietario de la tienda y recuerda haber gritado al agresor que no le pegara

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El estado de Gonzalo, el niño de 13 años apuñalado este sábado en Torrelavega por el propietario de una frutería, continúa mejorando y los médicos confían en que, si no hay complicaciones, pueda pasar a planta en las próximas 24 o 48 horas. El niño continúa en la UCI y sedado, porque tiene algunas molestias al respirar –la herida fue en el tórax- pero ya ha estado hablando con su familia e incluso ha empezado a comer.

El propietario de la tienda, un hombre de 30 años y nacionalidad china, ha sido acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa y el titular del Juzgado Número 1 de Torrelavega ha decretado prisión provisional incondicional. El hombre fue detenido, sin que opusiera resistencia, momentos después del suceso, que tuvo lugar sobre las 21.00 horas del sábado, en la calle José Posada Herrera.

Gonzalo ha explicado hoy a su familia lo ocurrido el sábado y ha negado que su pandilla, una docena de chavales en torno a los 13 o 14 años, estuviera robando en la frutería Xia o hicieran algo a su propietario. "Dice que algunos de sus amigos entraron, a comprar algo o hacer el canelo, y el resto, entre ellos él, se quedaron en la puerta", ha explicado a HoyTorrelavega su hermano, Álvaro Sánchez.

Según la versión de la víctima, ante la bulla de los niños, el propietario, de nacionalidad china, les echó "o les dijo algo" y todos salieron corriendo y alguno golpeó la cristalera, pero Gonzalo se tropezó con otro chico y quedó rezagado, momento en el presunto agresor, que había ido tras ellos con un cuchillo en la mano le agarró.

"Él no se dio cuenta de la puñalada, pensaba que le estaba pegando", ha relatado su hermano, al que el niño ha contado que grito al hombre "yo no he sido, yo no he sido, déjame, no me pegues".

A partir de ese momento, el niño no recuerda más. Uno de sus amigos al ver la herida y la hemorragia reaccionó y taponó la grave herida en el tórax, un gesto que posiblemente salvó la vida del chaval, ya que los médicos confirmaron la importante pérdida de sangre que había sufrido, a pesar de la rápida llegada de la ambulancia.

La familia ha agradecido y elogiado el temple que tuvo el chico, para, en medio de la conmoción por lo ocurrido, darse cuenta de que su amigo perdía mucha sangre e intentar parar la hemorragia. "Un chaval de 13 años, y los tuvo cuadrados", asegura emocionado Álvaro, que una vez más ha querido destacar la actuación de la asistencia sanitaria y del personal de Valdecilla.

Gonzalo ha asegurado a su familia que era la segunda vez que entraban en esa tienda. "La primera vez fue en Halloween y el propietario les hizo una broma, les dio un grito, como un susto", ha señalado su hermano a HT. Por eso la familia no entiende la reacción del presunto agresor, que "fue desmedida, hicieran lo que hicieran fue desmedida".

Álvaro Sánchez ha rechazado algunas interpretaciones que han llegado a la familia sobre el incidente, que cuestionan el comportamiento de los chicos. "Son niños normales, sanos, deportistas, muchos juegan en la Gimnástica, van a La Paz, pueden que hagan alguna gamberrada propia de su edad, pero nunca han tenido ningún problema", ha insistido, añadiendo que su hermano "es un chaval aplicado, que saca buenas notas, un niño normal".

La familia sabe a través de su abogado que el presunto agresor ha sido acusado de homicidio en grado de tentativa y que ha entrado en prisión, sin posibilidad de fianza. "Aunque ahora mismo a mí lo único que me preocupa es mi hermano, cuando esté en planta, dentro de unos días, ya pensaré en el agresor", ha asegurado Álvaro Sánchez, que tras ver y hablar con su hermano no podía ocultar su alegría.

"Cuando he visto que le daban un yogur y pedía más porque tenía hambre, he sido feliz" y aunque "no podemos decir que esté completamente bien, porque no es así, está bastante bien y evoluciona favorablemente", ha recalcado el hermano de la víctima.

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