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Torrelavega

Conservacionistas y Animalistas intercambiaron ideas para resolver problemas comunes

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AnimalistasEncuentro21

Representantes de primer nivel del conservacionismo y del animalismo se reunieron el pasado fin de semana en la II Jornada nacional de encuentro Conservacionista – Animalista con el objetivo de mejorar el entendimiento mutuo y el intercambio de ideas para resolver problemas comunes. La jornada fue organizada por la Federación DEAN, que aglutina a asociaciones de Defensa Animal de Cantabria, en colaboración con el Ayuntamiento de Torrelavega, y contó con la asistencia del director general de Derechos de los Animales, Sergio García, que explicó el anteproyecto de la Ley de Protección y Derechos de los Animales, actualmente en tramitación.

Para la búsqueda de espacios comunes, el encuentro contó con dos mesas de debate; la primera sobre el papel de los zoos, y la segunda sobre la pérdida de diversidad biológica, ambas moderadas por el biólogo y conservacionista Ignacio Jiménez Pérez, de la Fundación Global Nature.

Previa al desarrollo de la primera mesa de debate, se expuso la ponencia "Tauromaquia: maltrato animal legalizado" a cargo de José Enrique Zaldívar, presidente de la Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia y Contra el Maltrato Animal (AVATMA).

Los mayores puntos de aproximación se produjeron en la segunda mesa de debate, en torno al tema de las especies exóticas invasoras, que generan un problema importante tanto para la biodiversidad como para el bienestar animal. Conservacionistas y animalistas se han mostrado de acuerdo en que se trata de un problema provocado en buena medida por el comercio de animales exóticos, y ante el que es necesario más prevención, mediante "campañas de información y concienciación a la sociedad, y exigir a las administraciones una regulación más dura y asertiva" para evitar dicho comercio. Ambos grupos comparten la recomendación del cierre de las granjas de visones americanos, ya que los escapes frecuentes de estos animales fomentan la expansión de esta especie invasora y altamente dañina. También se coincidió en que este trabajo podría abordarse de forma conjunta por parte de ambos movimientos para obtener mejores resultados.

Con respecto a las colonias felinas en las ciudades y los gatos asilvestrados, también hubo acuerdo en la importancia de la prevención para evitar el abandono de estos animales y se ha destacado la necesidad de que los veterinarios exijan a sus clientes que los gatos lleven chip de identificación. Se mantuvieron, no obstante, posturas divergentes sobre el nivel de daños que causan estos animales a la biodiversidad al predar sobre otras especies.

Otro punto de confluencia fueron la "visión crítica de determinados modelos de consumo en torno a la producción intensiva de carne como las macro-explotaciones", que provocan sufrimiento animal, cambios del uso del suelo, además de otros perjuicios de tipo socioeconómico. Hubo consenso en apostar por otros modelos de producción más sostenibles, como, por ejemplo, la ganadería extensiva.

El medio rural es depositario de una buena parte de nuestra biodiversidad terrestre, y el planteamiento de sectores conservacionistas de buscar consensos con sus actores principales, inició un debate en el que será importante profundizar en próximos encuentros.

En cuanto a los zoos, al margen de reconocer de forma unánime que todos ellos deben mejorar las condiciones, se debatió sobre cómo debe ser su continuidad y si contribuyen o no a la conservación de especies y a la educación ambiental. Los representantes del sector animalista consideraron que no existe esa contribución, y que debe eliminarse la exhibición de animales y reconvertir las instalaciones en centros de acogida de individuos irrecuperables, mientras que el sector conservacionista consideró que algunos zoos sí juegan actualmente un papel de apoyo a la conservación proporcionando financiación a proyectos en el medio natural e instalaciones para cría en cautividad.

La jornada fue valorada por todos de forma muy positiva, y se coincidió en la necesidad de mantener y ensanchar los puentes de diálogo incorporando actores y territorios, contribuyendo además a rebajar la polarización en el debate público.

Los participantes en el debate sobre los zoos han sido Rosi Carro (ZOOXXI y Fundación Franz Weber), Anna Mulà (abogada especializada en Derecho Animal y Máster en CITES), David Perpiñán (veterinario), Pedro Pozas (Proyecto Gran Simio), Nuria El Khadir (Fundación CBD-Hábitat) y Andrea Cáceres (Zoo de Santillana del Mar)

Los participantes en el debate sobre la pérdida de diversidad biológica han sido: Anna Mulá (Fundación Franz Weber), Guillermo Palomero (Fundación Oso Pardo), Maite Bautista (Asociación de Abogados Prodefensa de los Animales PROTA), Gloria moreno (SEPRONA), Laura Moreno Ruíz (WWF España), Nicolás López (SEO BirdLife) y Jordi Palau Puigvert (autor del libro Rewilding Iberia).