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El aumento de la siniestralidad laboral

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CCOOGuillermo

Los datos de siniestralidad laboral del primer semestre de 2014 ofrecidos por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social muestran un aumento generalizado de los accidentes de trabajo en el conjunto de España y también en nuestra región, que confirman el deterioro de la prevención de riesgos laborales denunciada por Comisiones Obreras en todos los ámbitos referidos a la Salud Laboral.

Los datos son preocupantes, si tenemos en cuenta que el incremento se manifiesta de forma generalizada; tanto en términos absolutos como relativos (índices de incidencia) y en casi todos los sectores de actividad.

Los accidentes con baja en el primer semestre han crecido un 5%. Los accidentes mortales aumentan un 3'2% en el conjunto de actividades. Crecen un 54% en el sector agrario, un 36% en la industria y un 7% en la construcción.
Además, los accidentes "in itinere" aumentaron un 20'5%.

En Cantabria se registraron hasta el mes de junio 2.300 accidentes con baja, lo que representa un 7% más que el mismo periodo del año anterior.

 

Según datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo (ICASST) la siniestralidad laboral ha crecido en la región en todos los sectores productivos, tanto los accidentes leves, graves y en los mortales.
Donde más ha aumentado la siniestralidad es en la construcción, un 11% más que el periodo de 2013. Industria ha aumentado un 8% y en los Servicios el ascenso ha sido del 6%.

La mayor parte de los accidentes fueron leves (2.256). Accidentes graves hubo 23 y cuatro accidentes mortales.
A los 2.300 accidentes laborales con baja hay que sumar otros 3.800 siniestros, que no requirieron baja.

Estos datos negativos ratificaron la hipótesis que Comisiones Obreras viene defendiendo desde hace meses. La prevención está siendo la primera víctima de la falta de inversiones en las empresas, los recortes brutales en las administraciones públicas y de las políticas neoliberales aplicadas por los diferentes gobiernos.

El aumento del empleo temporal precario y a tiempo parcial unido a un altísima rotación en los puestos de trabajo está impidiendo articular de forma eficaz la prevención en las empresas.

No debemos olvidar las enfermedades profesionales (EEPP) que están afectando, cada vez más, a un porcentaje muy alto de la clase trabajadora. Enfermedades del trabajo, que en lugar de ir aflorando a la superficie, se encuentran más tapadas que nunca.

El derecho a la seguridad y a la salud en el trabajo, una de las principales aspiraciones de las políticas sociales europeas desde hace años, hoy es considerado un obstáculo para aumentar la tan ansiada competitividad de la economía. Las condiciones económicas han invadido las parcelas de la salud y seguridad laboral.

Estamos en un momento preocupante. Los trabajadores tenemos que participar y hacer valer nuestros derechos en prevención. Los representantes de los trabajadores deben exigir una mayor participación a las empresas.

Hay que examinar las condiciones de trabajo para hacer visible si estamos trabajando con sustancias o máquinas con riesgos sin evaluar, altas exigencias físicas, con tensiones derivadas de una mala organización del trabajo, etc. Esto pueden generar resultados adversos para la salud u ocasionar daños y enfermedades del trabajo que pueden derivar en accidentes o enfermedades profesionales.

Seguimos exigiendo a las empresas participación en prevención, para que las condiciones de trabajo sean saludables.

Desde Comisiones Obreras instamos a las instituciones para que hagan cumplir las obligaciones preventivas a los empresarios y que no sean meras obligaciones formales.